Las lecciones de el GM David Bronstein (9)

Combinación 5. 

por el gran David.

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[Event "Campeonato del Moscú"] [Site "?"] [Date "1947.??.??"] [Round "?"] [White "D. Bronstein"] [Black "V. Panov"] [Result "1-0"] [ECO "C30"] [PlyCount "63"] [EventDate "1947.??.??"] 1. e4 e5 2. f4 Bc5 3. Nf3 d6 4. c3 Bg4 5. fxe5 dxe5 6. Qa4+ Bd7 7. Qc2 Nc6 8. b4 Bd6 9. Bc4 Nf6 10. d3 Qe7 11. O-O O-O-O 12. a4 a5 13. b5 Nb8 14. Nbd2 Bg4 15. Nb3 b6 16. Be3 Nbd7 17. Rae1 Be6 18. Bxe6 Qxe6 19. Kh1 Qe7 20. Nbd2 Ng4 21. Bg1 h5 22. Nc4 g6 23. Nxd6+ cxd6 24. Nd2 f6 25. Nc4 Kb7 {Diagrama [#]} 26. Bxb6 {Las dimensiones de un tablero de ajedrez no son grandes. El espacio constituye un concepto muy relativo. Se puede jugar en un ajedrez de bolsillo o en un tablero mural pero en ningún caso se tendrán más de 64 casillas disponibles. Huelga decir que si se quiere vencer en la batalla, es preciso controlar el mayor espacio posible; para lograrlo, resulta lógico el uso de piezas de largo alcance, como los alfiles. En esta posición el alfil blanco ha encontrado una casilla muy buena. Como medida de seguridad extra defiende el punto "h2" pero al mismo tiempo ataca el escaque "b6", cerca del rey enemigo. Normalmente un ataque tendrá éxito si puede llevarse a cabo por carias piezas simultáneamente. Es ésteel motico por el que el caballo, deno tan largo alcance, ha llegado hasta su posición en "c4" para acrecentar la presión sobre el peón de "b6". El sacrificio del alfil destruye las defensas alrededor del rey negro y permite a las blancas avanzar hasta la 8|_ fila sus dos peones del flanco de dama. V. Panov era muy buen maestro de ajedrez y periodista. En 1930 escribió un maravilloso libro titulado "Un ataque". Cuando abandonó Izvestia su plaza fue ocupada por mí. Cuando no conseguí la puntuación de 12'5 -11'5 en el match por el título con Botvinnik (1951), se entristeció. "Has arruinado mu columna de ajedrez" dijo "Habría terminado ya mi artículo "Un joven y nuevo campeón del mundo tras haber trabajado muchísimo en él"} Nxb6 27. Nxa5+ Kc7 28. Nc6 Qe8 29. a5 Nd7 30. b6+ Kb7 31. a6+ Kxb6 32. Rb1+ {Las negras se rinden, jaque en 4 ¿Qué hemos aprendido en esta partida? Cuando Philidor sentenció que los peones eran el alma del ajedrez, pensaba que éstos debían usarse como fuerza de ataque persiguiendo a las piezas contrarias a lo largo y ancho del tablero. Él nunca sospechó que las futuras generaciones usarían los peones para constituir muros defensivos, pero esto es exactamente lo que hice yo mismo en la primera parte de la partida. Sin embargo, me percaté luego de mi error y consiguientemente cambié de estrategia. Encontré una buena maniobra con los caballos, y apoyándome en ellos desplegué la fuerza de mi alfil. Dicha estrateguia sóo fue posible porque las negras también violaron las ideas de Philidor, al utilizar sus peones de una forma muy pasiva. Después de la jugada blanca 4.c3, ocupando así la mejor casilla para el "perezoso" caballo de dama de "b1", la mejor respuesta de las negras hubiera sido 4. ..., f5; la misma jugada que el propio Philidor había recomendado tras 1.e4 e5 2. Ac4 ¡No deben olvidarse los peones!} 1-0

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